lunes, 27 de diciembre de 2010

INCERTIDUMBRE O FELICIDAD

Un nuevo año comienza y todo el mundo habla de lo acontecido durante el último año, breve resumen de cada instante vivido, y de los planes para los siguientes 365 días.
Parece como si el paso entre la primera campanada de la medianoche y la última dejaran su vida pasada anclada en un remoto puerto y con un nuevo buque se echaran a la mar, empezando desde cero. Buenos propósitos lanzados al aire que como aire se esfuma y se va con el viento. A la mañana siguiente todo permanece intacto, mismas personas mismos hábitos, algún recuerdo borroso quizá aún persistiendo un par de días y, al final, todo sigue igual.
Yo no quiero hacer balance de unos días pasados porque sería injusta con los buenos y malos momentos, porque mi pasado es la mochila que me acompaña en este camino por la vida, porque el futuro es incierto, porque los verdaderos sueños se van forjando cada día y porque a cada instante, los obstaculos o atajos que encontramos en el camino nos desvían continuamente de la ruta trazada en el mapa. O ¿acaso alguien nos puede augurar que pasará mañana?

martes, 21 de diciembre de 2010

NUNCA SUFICIENTE

Hoy es uno de esos días plomizos en los que desde antes incluso de abrir los ojos al despertar, ya sabes que será un día dificil. Sientes esa presión sobre tu cuerpo como si fuera una pesada manta, y tu mente se niega a hacerse paso entre los sueños para salir a la realidad.

Te asomas a la ventana y ves que hace un día horrible, el cielo está completamente gris y llueve a cantaros, tanto que temes que al abrir la ventana, entre agua dentro de la habitación. Al menos, el olor a humedad te llena los pulmones y una ligera sonrisa se asoma en tu cara. Siempre te han gustado los días de lluvia, con ese olor tan característico como a ropa limpia, el cielo gris y las gotas deslizándose por los cristales, pero percibes algo extraño en el ambiente, ese peso indescriptible que notas con cada moviento, como si el aire fuera más denso que de costumbre.

Al salir a trabajar sientes la misma densidad en la calle, como si te movieras por una atmósfera compuesta por mercurio. El trafico está imposible, ves coches parados en el arcén de la carretera que se han dado algún golpe, nada importante, sólo chapa. Los pensamientos fluyen, van de aquí allá, pensando en esa extraña sensación que te embarga desde que te has despertado esta mañana.
Después del largo trayecto llegas a tu destino, pensando si tal vez debieras ponerle remos al coche, pues algunos de los charcos que se forman en la carretera son como pequeños lagos en una montaña de negro hormigón.

Y allí, ZASSSS!!!!!, la primera bofetada nada más entrar. Porque el aire olía raro, porque la atmósfera estaba extraña, porque no importa lo bien que lo hagas, ni la buena intención que le pongas a tus acciones, no importa cuanto curres, ni cuanto te dejes la piel allí, al final... al menor desliz, al menor descuido, todo eso se olvida, porque no olvidemos que nunca es suficiente.

sábado, 4 de diciembre de 2010

Melancolía


Melancolía: Tristeza vaga, profunda, sosegada y permanente, nacida de causas físicas o morales, que hace que no encuentre quien la padece gusto ni diversión en nada.


"Las gentes propensas a la melancolía son las mejor dotadas para el amor" Stendhal.


"Y en este titubeo de aliento y agonía, cargo lleno de penas lo que apenas soporto. ¿No oyes caer las gotas de mi melancolía? " Rubén Darío.

domingo, 28 de noviembre de 2010





The Moon is shining but all is dark around it. Shadows are coming covering all in a deep darkness. The Moon is sad, The Moon is lost in tears, The Moon is dying.

The Moon´s heart is broken. Now all is darkness.

No more dreams, no more songs, nothing more for The Moon, only the last song.





miércoles, 24 de noviembre de 2010

domingo, 14 de noviembre de 2010

Si todo fuera...

Si todo fuera tan fácil como subir a la azotea y gritar ante la inmensidad. Si todo fueran tan fácil como cerrar los ojos por un momento y que al abrirlos todo el dolor se hubiera esfumado. Que con cada lágrima que se desliza por mi rostro se fuera una pena, que con cada suspiro se hiciera realidad ese deseo...

Si todo fuera tan facil gritaría, gritaría para dejar marchar la rabia que llevo dentro. Gritaría hasta que la garganta me ardiera de dolor y el sonido se quedara dentro.

domingo, 7 de febrero de 2010

PIES, PIES Y MÁS PIES.

Pies, pies y más pies. En frente, a su izquierda, un par de zapatos marrones, bien cuidados, lustrosos, aunque algo estropeados ya por el paso del tiempo. Las arrugas que marcan los pasos, pequeños arañazos que personalizan los zapatos. A su lado descansaban unas viejas zapatillas, sucias, despegadas en los laterales, pero que miraban con cierto aire insolente, como aquel que, en su momento, fue alguien importante y ahora permanece aislado en el olvido. La mirada que vaga de un punto a otro y permanece quieta un instante. Observando una esquina llena de cáscaras de pipas. Un reproche fugaz recorre su mente. El tren se detiene, las puertas del vagón se abren, los zapatos marrones se van, ya no volveran a verse nunca más. En su lugar a parecen unos brillantes zapatos de tacón. Pero el ojo apenas se detiene en ellos. El oido ha captado toda su atención. Alguien iba escuchando música en un móvil, sin cascos, imponiendo al resto de pasajeros esa canción.
La sensación de hastío crece en su interior. Algo en su interior le pide calma. Los ojos intentan recuperar el protagonismo, intentando no escuchar lo que pasa a su alrededor. Ahora todo está oscuro, prefiere olvidar dónde se encuentra, sólo quiere soñar. Sueña con un momento de soledad, con un pequeño instante de silencio lejos de la gran ciudad.
El tren se detiene otra vez, pies y más pies vuelven a moverse. Unos se empujan, otros se deslizan. Algunos incluso se saludan.